Escrito por: Rodney Shakespeare
¿Qué se puede decir de un hombre que no sólo es un hipócrita sonriendo sino también un irremediable mentiroso? ¿es una repugnante escoria de la humanidad? ¿es una pieza de trabajo mal hecho? ¿es un canalla?
¿O es Benyamin Netanyahu, el primer ministro de una entidad llamada Israel?
La palabra “entidad” aquí es importante porque Israel no es un estado con fronteras fijas. Ni siquiera es un estado con un mensaje de amistad para los territorios cercanos. Más bien, es un repugnante, paranoico, llorón y racista perro de ataque en una constante intención de expandir su imperio genocida en las tierras de otros.
¿Puede imaginar que Netanyahu haya descrito a Palestina como “una entidad parecida a una organización terrorista?”. Sí, lo podría imaginar porque Palestina se encuentra en el camino de la expansión israelí en las tierras de otros.
Esta completa perversión del lenguaje es familiar para aquellos que entienden que lo que los nazis hicieron a los judíos es lo que hacen hoy en día los judíos israelíes a cualquiera que se interponga en su camino. En 1943, el Ejército nazi rodeó el gueto de Varsovia y, diciendo que estaba matando ratas, procedió a inundar las alcantarillas (en las que los defensores judíos estaban escondidos) y usar gas venenoso.
¿Y qué estaban haciendo estos nazis modernos - los israelíes - a las “ratas” de Gaza el verano pasado?
Ellos estaban bombardeando la zona con fósforo blanco (cuando te llega esta materia química, empieza a quemar el cuerpo y nada puede pararla); estaban usando gas venenoso; estaban disparando proyectiles con uranio empobrecido, y estaban dejando caer una especialidad israelí (aunque tienen una gran variedad de este tipo de especialidades), las bombas DIME, que cortan las piernas de la gente. Y cuando el valiente pueblo de Gaza y el valiente pueblo de Palestina se resisten a la ofensiva israelí, Netanyahu los llama terroristas en lugar de los defensores nacionales, que es su verdadera descripción.
Sí, el régimen de Israel es una desgracia para el mundo. El único país que está ahora más en desgracia es EE.UU. Esto se debe a que EE.UU. da dinero y arma al régimen de Israel y proporciona el principal apoyo político que el régimen usurpador necesita en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU) para seguir con su agresión.
Además, con el fin de promover sus objetivos infames, esta apestosa pandilla de sionistas se ha asociado, en todas las formas imaginables, con organizaciones terroristas. La principal organización terrorista, por supuesto, es él mismo régimen de Israel, pero aún tiene una parte que es (con la excepción de la CIA de los EE.UU.) el departamento responsable de engaños más sucios en el mundo. Se llama Mossad. Luego están el ejército y la fuerza aérea israelíes, que no tienen ninguno de los honores que se atribuye a quienes defienden su país contra los agresores. Pues, ellos mismos son los agresores y se divierten atacando a la población civil y haciendo payasadas con la marina israelí, al que le gusta disparar a niños pequeños que están jugando al fútbol en la playa.
A todo esto, por supuesto, se puede añadir el apoyo israelí al grupo terrorista EIIL (Daesh, en árabe) que corta cabezas y gargantas de los civiles del mismo modo que al régimen de Israel le gusta cortar las piernas.
Pero, ¿qué impulsó a Netanyahu para decir que Palestina es una entidad vinculada a una organización terrorista?
La respuesta es el miedo. El niño grande se ha palidecido porque los palestinos han entregado solicitudes para formar parte de veinte tratados internacionales. Estos incluyen solicitudes de adhesión al Estatuto de Roma y la Corte Penal Internacional. Sí, la Corte Penal Internacional podría, como un pequeño ejemplo, tener una mala opinión de aquellos que bombardean a las mujeres y los niños. Además, la Corte tal vez desee tener en cuenta todos los ataque israelíes del verano pasado contra Gaza en los que murieron más de 2 mil personas y resultaron heridas más de 10 mil (muchos de ellos fueron alcanzados por las bombas DIME).
Ante la solicitud de Palestina para unirse a los tratados internacionales, podemos esperar como siempre, una respuesta violenta por parte de los israelíes. Pero el movimiento de boicot y sanción de esta maloliente entidad está creciendo día a día en todo el mundo. Además, el principal partidario de régimen de Israel (EE.UU.) está ahora despreciado por toda la gente decente en todo el mundo, sobre todo porque defiende los crímenes de guerra del régimen de Tel Aviv.
Ahora es muy difundida la frase: vamos a boicotear a régimen de Israel y a los EE.UU., porque EE.UU., piensa que los grandes cambios que están ocurriendo en el mundo no le afectan. De hecho, piensa que él y sólo él, hace los cambios, aunque sí, sin duda es experto en hacer cambios negativos. Bueno, EE.UU. va a despertarse un día y entonces se dará cuenta de que el mundo no sólo se ha levantado contra el maloliente trapo que es el régimen de Israel, sino también contra su principal valedor.
Entonces, ¿qué es Netanyahu? ¿un irremediable mentiroso?¿una repugnante escoria de la humanidad?¿una pieza de trabajo mal hecho? ¿un canalla?
ymc
Rodney Shakespeare, graduado de la universidad Cambridge es profesor de económicas binarias y ha escrito extensamente sobre los asuntos del Oriente Medio enfocando especialmente en los temas latentes relacionados con Irán. Es un conocido crítico de las políticas del régimen israelí. De momento, trabaja como lector en la universidad privada más grande de Indonesia, Trisakti.
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