Recientemente, el papa, al condenar la publicación de la nueva caricatura del Profeta del Islam, el Hazrat Mohamad (la paz sea con él) en el semanario satírico francés ‘Charlie Hebdo’ advirtió de que no se puede insultar la fe de otros. “Soy cristiano. Si alguien dice cosas ofensivas sobre Jesús, yo me ofendería. Pero en una sociedad libre no tengo derecho a vengarme de ellos”, ha alegado Cameron para luego hacer hincapié en que en tales sociedades ridiculizar las religiones es algo común. Las declaraciones de Cameron se han producido después de que el papa pidiera el jueves respetar las creencias de los demás, e insistiera en que ni la libertad de religión ni la libertad de expresión en las sociedades libres pueden ser utilizadas como una justificación para ofender a otros. Las caricaturas blasfemas publicadas en el semanario francés han provocado la furia de toda la comunidad musulmana del mundo que condenó tajantemente la reciente portada de dicha revista. La sede de ‘Charlie Hebdo’ en París (capital francesa) fue el 7 de enero blanco de un ataque terrorista, que quitó la vida de 12 personas. La violencia no se detuvo y, los dos días siguientes, París fue escenario de otros dos ataques, elevando el número de víctimas a 17. El grupo terrorista Al-Qaeda en Yemen asumió, en un vídeo colgado en Internet, la autoría del ataque a ‘Charlie Hebdo’. Asimismo, el grupo takfirí EIIL (Daesh, en árabe) reivindicó la responsabilidad del atentado y amenazó al Reino Unido y EE.UU., señalando que serían los próximos blancos. Al respecto, las autoridades francesas han aceptado que no pueden prohibir que regresen a su territorio los terroristas franceses que viajan a otros países a cometer actos violentos. Esta semana, el jefe de la Oficina Europea de Policía (Europol), Rob Wainwright, cifró el número de europeos que participan en las actividades terroristas de las bandas takfiríes activas en Siria e Irak en unas 5000 personas.
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