La presidenta de Argentina, Cristina Fernández
deploró el domingo que el caso AMIA se haya convertido en “un tablero de
operaciones políticas” que se utiliza para plantear pruebas
inexistentes.
La utilización política de la causa AMIA donde hay 85 víctimas que piden justicia asquea, porque la utilizaron y la siguen utilizando desde afuera y desde adentro para hacer geopolítica".“La utilización política de la causa AMIA donde hay 85 víctimas que piden justicia asquea, porque la utilizaron y la siguen utilizando desde afuera y desde adentro para hacer geopolítica”, afirmó la mandataria durante la apertura del 133 período de sesiones ordinarias del Congreso Nacional.
En respuesta a ciertos diputados que en la sesión exhibían carteles con la frase “Habla de la AMIA”, la jefa de Estado dejó claro que “de la AMIA hablo desde 1994 pidiendo justicia”.
Agregó que lo ocurrido a la AMIA es un atentado “contra la República Argentina y todos los argentinos" y pidió que así como se aborda este caso se aclare el atentado contra la embajada de Israel, ocurrido en 1992, cuya investigación está en manos de la Corte Suprema desde entonces "sin que haya un solo acusado".
Aún después de 21 años “Israel reclama por la AMIA, pero no por la explosión de su propia embajada”, cuestionó la dignataria al tiempo pidió que el embajador israelí en Buenos Aires en 1994, Itzhak Avirán, declare en torno al caso AMIA.
Cabe recordar que meses atrás, el diplomático israelí había dicho que el régimen de Tel Aviv ya se había encargado de los responsables del atentado a la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA) de Buenos Aires, cometido el 18 de julio de 1994.
Fernández, en otra parte de su discurso, tras lamentar la muerte del fiscal Alberto Nisman, encargado del caso AMIA “como la de cualquier ser humano”, se refirió a las contradicciones del fallecido abogado. “¿Con cuál Nisman me quedo? ¿Con el que me acusa de encubrimiento o con el que se dirige a mí reconociéndome todo lo que habíamos hecho y dicho para que yo me presente ante el Consejo de Seguridad?”, se preguntó la mandataria.
Hace unos días, el juez Daniel Rafecas rechazó la decisión del fiscal Gerardo Pollicita de hacer suya la acusación de su difunto colega para imputar a Fernández y su canciller, Héctor Timerman de encubrimiento a favor de los involucrados en el atentado contra la mutual judía.
Cristina defendió el memorándum de entendimiento que la Argentina firmó con Irán para esclarecer el atentado a la AMIA y dijo que el caso está siendo politizado en un escenario en el que la Administración de Barack Obama negocia un acuerdo nuclear con Irán en medio de una fuerte resistencia de algunos sectores internos de Estados Unidos y la clara oposición del régimen de Israel.
En esta sesión, Fernández también abordó temas económicos. Dijo que ha desendeudado definitivamente a su país reduciendo su deuda pública y privada un 11 por ciento en forma negativa y anunció el envío de cuatro proyectos de ley al Congreso, tres de ellos referidos a la promoción y protección del sector industrial y otro para la estatización de los ferrocarriles.
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